Un hombre destruye una estatua de 126 años de antigüedad por hacerse un selfie. Ya hemos visto, en más de una ocasión, los extremos a los que llega la gente para sacarse la selfie perfecta; tanto es así que conocemos muchos casos de gente que ha acabado herida o peor, muerta, por una autofoto perfecta. Sin embargo, cada día nos sorprende con nuevas historias de alguien que, en el afán de una selfie para recordar, ha acabado causando un accidente con daños irreparables. En este caso, al menos, la víctima mortal ha sido una estatua de 126 años de antigüedad en Lisboa, Portugal, y no hemos tenido que aumentar el número de fallecidos por selfie que llevamos este año. Según el New York Post, un joven quería sacarse la foto perfecta junto a la estatua, de 126 años de edad, del rey portugués Dom Sebastiao. En lugar de situarse frente a ella y tomar la foto, como han hecho ya un incontable número de turistas, el joven pensó que sería una gran idea trepara a la estatua y hacer allí la foto.
La estatua de Dom Sebastiao estaba situada a las afueras de la estación de tren Rossio en Lisboa, Portugal, y ahora los visitantes sólo podrán recordar dónde se erguía antes, orgullosa. Poco después de que el joven trepara a la estatua esta se derrumbó a sus pies, impidiéndole hacerse su tan deseada selfie; estaba claro que a Su Alteza Real no le apetecía nada aparecer en las fotos del viaje de un turista de lo más irrespetuoso. Además de irse sin su foto, parece que el joven sí se llevará un recuerdo de Dom Sebastiao: por lo que parece, Infraestruturas de Portugal, el cuerpo del gobierno responsable de la estatua, piensa presentar cargos contra este joven. Podría ser castigado por causar daños a un símbolo de la historia nacional de Portugal, algo que sin duda le hará replantearse su actitud la próxima vez que vaya de viaje.
