La discontinuación del Galaxy Note 7 de Samsung ha tenido múltiples efectos en la compañía y en el mercado de smartphones en general. La compañía surcoreana ha sufrido pérdidas de miles de millones de dólares según se dice, y su imagen de marca ha sufrido un daño importante. Ahora, Samsung intenta compensar la pérdida en ventas del Note 7 concentrándose en Galaxy S7 y S7 edge. La compañía surcoreana pretende hacer el Galaxy S7 Edge más atractivo a los consumidores lanzando la variante Coral Azul del teléfono. Considerando las enormes pérdidas, un rumor en particular de las pasadas semanas decía que Samsung podría lanzar Galaxy S8 antes de lo previsto para recuperar parte de los beneficios perdidos y la confianza del consumidor.

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Representantes de Samsung Electronics han negado el rumor y han dicho que el Galaxy S8 será anunciado a finales de febrero durante el MWC 2017 de Barcelona. Generalmente, Samsung anuncia los nuevos modelos de la serie Galaxy S durante el Mobile World Congress cada año, así que no sorprende que la compañía quiera adherirse a su plan inicial.

Samsung Galaxy S8 será lanzado globalmente en marzo del próximo año

El smartphone estará disponible en Corea del Sur y otros países en algún momento a mediados de marzo del próximo año. Un representante de Samsung ha dicho «Ahora mismo, no tenemos planes para lanzar Galaxy S8 antes de tiempo.»

Parece que incluso antes de que se lanzase el Galaxy Note 7 la compañía pretendía anunciar el Galaxy S8 en febrero del próximo año, y pretende seguir haciéndolo. Además, un representante de la compañía ha dicho que sería imposible en términos realistas definir la fecha de lanzamiento antes de eso.

Los problemas de seguridad han causado la perdición del Galaxy Note 7, pero la compañía aún tiene que revelar cuál es el defecto que causaba que el teléfono se sobrecalentara y se prendiera fuego. Varias investigaciones están en curso, pero hasta que el problema sea identificado y resuleot, Samsung lo pasará mal recuperando la confianza del consumidor o asegurándose de que el mismo problema no se encuentre en su próximo smartphone insignia. Un lanzamiento temprano podría significar una fecha de entrega más apretada para que los ingenieros de Samsung encuentren el error y menos tiempo para asegurar que pasa los test de seguridad.