Ya hemos escuchados historias con anterioridad sobre teléfonos móviles que explotan y por desgracia aunque muchas fabricantes se esfuerzan en intentar que esto no suceda, parece que de vez en cuando dichos accidentes continúan ocurriendo a pesar de todo. La última historia sobre un caso similar procede de The Daily Mail, que informó sobre el caso de un ciclista de la ciudad de Sydney, en Australia, que ha sufrido por desgracia quemaduras de tercer grado después de que su iPhone explotase cuando lo tenía guardado en el bolsillo trasero del pantalón. De acuerdo con el mismo ciclista, que se llama Gareth Clear, parece que la explosión podría haber tenido su origen después de una pequeña caída cuando falló con el pie al pisar el pedal de la bicileta.

Después de la caída, al levantarse, Clear se percató de que había humo procedente desde su espalda y una sensación de quemazón en su nalga; hasta que momentos después se percató de que era el iPhone la fuente de la que procedía el calor y el dolor. Clear ha declarado que tras ver la nube de humo y de sentir el dolor, intentó sacar el teléfono sin éxito, puesto que se había quedado pegado al derretirse a través del pantalón corto y la piel.

iPhone

Apple ya ha contactado con el afectado

Tampoco pudo arrancar el teléfono, según ha declarado, porque el aparato estaba demasiado recalentado como para tocarlo. Entonces Clear se vio forzado a utilizar el puño contra el teléfono para quitárselo de la piel, donde permanecía pegado. Las quemaduras fueron tna graves que Clear necesitó un trasplante de piel y ha estado hospitalizado durante una semana, mientras sigue el tratamiento que le han dado.

No parece claro que fue lo que causó que el teléfono explotase, pero parece que Apple se podría haber puesto en contacto con Clear y están investigando el asunto para descubrir el origen del problema.