Se rumorea que Apple está planeando un rediseño importante del iPhone del año que viene cuando celebre el décimo aniversario del ispositivo, y una de las actualizaciones que es probable que haya es la pantalla OLED, que se extendería de un borde a otro en el lado del frente. Mientras que un acercamiento sin engaste para el iPhone tiene sentido dado que los rivales ya lo están haciendo, Apple parece más inclinada hacia una pantalla OLED normal que podría incorporar partes dirigidas al frente, pero conservando pequeños engastes. Un nuevo concepto creato por AppleiDesigner y posteado en Youtube por TechDesigns muestra una posible versión de este nuevo iPhone, imaginando no solo OLED, sino también una pantalla curvada.

No hay ni que decir que esta opción es muy similar a la usada por Samsung en el Galaxy S7 Edge, pero el diseñador de concepto cree que tal opción tendría mucho sentido en un iPhone, aunque no estamos seguros de que Apple fuese a estar de acuerdo con tal idea.

Como se esperaba, el concepto muestra las tradicionales pantallas de 4,7 y 5,5 pulgadas, pero al mismo tiempo, el diseñador también quería alinear su idea con la reciente especulación de que el iPhone 8 también podría tener versiones de 5,0 y 5,8 pulgadas. Dicen los rumores que Apple podría ofrecer pantallas más grandes en la siguiente generación iPhone, pero al mismo tiempo retendría las mismas dimensiones reduciendo los engastes.

Los sistemas de cámara dual están disponibles en todas las versiones ahora mismo, pero es poco probable dado que Apple aún quiere mantener algunas opciones exclusivas para el Plus. Si creemos estos rumores, Apple podría tirar por un diseño totalmente en cristal para el iPhone 8, manteniendo la pantalla OLED exclusiva para la versión Plus. Esperad que los rumores como este sigan saliendo en los próximos meses a medida que nos acercamos al otoño de 2018 en el que el nuevo iPhone saldrá, así que es probable que lo mejor sea cogerlo todo con pinzas.