Durante los últimos años, se ha convertido en tradición revelar cuáles han sido las  peores contraseñas del año anterior, todo gracias a SplashData. Esta plataforma lleva ya años ofreciéndonos las peores (aunque, en cierto sentido, las mejores) contraseñas del año anterior; y parece que cada año son las mismas. ¡La gente no aprende! La firma ha compilado su lista agregando contraseñas de casi dos millones de contraseñas filtradas online durante 2015 ara averiguar cuáles son las contraseñas más comunes… y las más terribles. Por si os preguntáis cuál ostenta el horrible primer puesto como peor contraseña del año, esta es la misma del año anterior, 2014: “123456”. ¡Así es! Aunque creáis que no es posible, esta contraseña tan obvia ha sido, de nuevo, la peor y más popular de las contraseñas de 2015.

contraseñasPuede que “123456” sea la primera de las peores contraseñas de 2015, pero desde luego no es la única extremadamente fácil de averiguar. Aunque os cueste creerlo, el segundo lugar le pertenece a la contraseña “password”, es decir, la palabra “contraseña” en inglés. Sí, queridos lectores, al igual que hay gente que llama a su perro “Perro” (y la hay), hay gente que usa la palabra “contraseña” como contraseña. ¡Todo muy seguro! En tercer lugar tenemos la no menos genial contraseña “1234578”, un poco más larga; y en cuarto puesto, para los amantes de las letras, la palabra “qwerty”, que como sabéis denomina el tipo de teclados que utilizamos la mayoría.

Hay, sin embargo, nuevas entradas en la lista de peores contraseñas que no estaban el año pasado y que corresponden a deportes y cultura pop. Por ejemplo, el año pasado se dieron casos de contraseñas llamadas “starwars” (el estreno de El Despertar de la Fuerza ha pegado fuerte); “solo”, suponemos que como el mítico personaje Han Solo; “princess”, princesa en inglés; e incluso “fútbol” y “baloncesto”, que han llegado al top 25 de peores contraseñas de 2015. Si alguna de tus contraseñas coincide con las mencionadas anteriormente, está de más decir que deberías cambiarla de inmediato, por lo menos a algo no tan sencillo de averiguar. Una buena manera de asegurar tu información online es utilizar una frase en lugar de una sola palabra, algo que sea sólo tuyo y que sea difícil de averiguar para los demás, aunque te conozcan personalmente.

Otro método de estar seguros es, evidentemente, no utilizar contraseñas tan estúpidas.