Google ha anunciado ayer oficialmente que, desde principios de junio, las futuras versiones de Chrome OS tendrán soporte para la Google Play Store de la compañía, mientras que el soporte total se añadirá en otoño. Las noticias se filtraron a mediados de abril, cuando un usuario de Chromebook vio una opción en progreso en el panel de ajustes de Chrome OS que permitía a los usuarios “activar apps de Android en su Chromebook”. Google acaba de hacer oficial la noticia ayer en su conferencia de desarrolladores I/O 2016, que tiene lugar en Mountain View. Parece que Chrome OS podría hacer funcionar Android por sí mismo, pero en este momento se encuentra extremadamente limitado dado que Google solo ha trabajado con unos pocos desarrolladores para portear sus apps. Este cambio permitirá que la ejecución de apps sea mucho más sencilla.

Chrome OSSolo unos pocos dispositivos recibirán soporte de Play Store al principio.

“Google Play empezará en el canal de desarrolladores con M53 en el ASUS Chromebook Flip, el Acer Chromebook R 11 y el último Chromebook Pixel,” han anunciado ingenieros de Chrome OS. “Con el tiempo, esto también se extenderá a otros Chromebooks del mercado.”

Una vez esto ocurra, los usuarios verán una ventana popup en sus pantallas que les preguntará si quieren beneficiarse del acceso a Play Store e instalar apps de Android en su Chromebook. Los usuarios no tendrán que hacer nada excepto clicar en “Acepto.” No habrá ningún software personalizado que instalar ni se necesitarán actualizaciones de hardware. Las apps funcionarán para los dispositivos Chromebooks que tengan soporte de toque en un principio, pero los dispositivos sin ese soporte también lo recibirán más tarde, probablemente en otoño.

Los Chromebooks son muy populares.

Los datos recogidos por Future Source Consulting el año pasado revelaron que los Chromebooks son enormemente populares en el sector educativo, sobre todo en EEUU. Lo que es más: Google también ha hecho público que los Chromebooks han superado a los Macs en los envíos totales, convirtiéndose así en el segundo sistema operativo para PC más popular de EEUU.

Esto se debe a que los dispositivos Chromebook son baratos y están restringidos a Chrome OS, que es básicamente un navegador hinchado. La capacidad de funcionar con un OS ligero ayuda a su rendimiento, pero también hace que los dispositivos sean ideales para entornos controlados, como escuelas, hospitales, empresas, agencias del gobierno, etc.

Google ha asegurado a los administradores del sistema que seguirán en control de sus redes, y que pueden bloquear la integración de Google Play Store en sus dispositivos para entornos dedicatos al trabajo, o al menos usar una lista blanca para permitir la instalación de apps de productividad únicamente.

Este anuncio se aleja bastante de lo que Wall Street Journal anunciaba el pasado octubre, cuando los rumores decían que Chrome OS y Android iban a fusionarse. Los dos proyectos sí se fusionaron, pero no a costa de Chrome OS, como se pensaba en un principio.