Se espera que Apple lance tres modelos de iPhone diferentes el año que viene, y Ming-Chi Kuo (el reconocido analista de KGI Securities) afirma que es muy probable que la compañía presente una mejora sustancial de la batería en cada uno de ellos. En una nueva nota a los investigadores, Kuo afirma que la batería en forma de L que aparece en el iPhone X llegará también al iPhone de 5.8 pulgadas de 2018, que será el sucesor directo del iPhone X, y a la versión de 6.5 pulgadas, la versión Plus del iPhone X. Por otro lado, el iPhone de 6.1 pulgadas que podría llegar en 2018 lo hará con una batería rectangular.

iPhone X

Este iPhone tendrá un precio más bajo y una pantalla LCD para ahorrar costes, y aunque no tenga el diseño en forma de L sí que podría llegar con ciertas mejoras de la batería.

iPhone X 2018 podría venir con una batería de 3.000 mAh

Por ahora, se estima que Apple podría aumentar la capacidad de la batería del iPhone de 5.8 pulgadas de 2.716 mAh, como en el iPhone X actual, a 3.000 mAh en su sucesor para el año que viene, lo que la incrementaría en un 10%. Dada la obsesión de Apple con la optimización del software, un 10% más de batería probablemente acabe traduciéndose en al menos dos horas más de batería, como suele pasar con las nuevas generaciones de iPhone.

Aunque los modelos de 2018 lleguen con pantallas distintas, Apple podría traer el Face ID en todos ellos, por lo que el diseño del iPhone X podría mantenerse en toda la línea. Eso sí, el iPhone más asequible podría perder algunas características, como la carga inalámbrica, debido a un cuerpo de metal. Por ahora esto no son más que rumores, pero hasta ahora Ming-Chi Kuo siempre ha estado muy acertado en sus predicciones sobre Apple.