Un juez ordena a Apple a ayudar al FBI a hackear el iPhone de uno de los tiradores de San Bernardino. Un juez federal ha ordenado hoy a Apple que ayude a las fuerzas de la ley a penetrar en el iPhone de uno de tiradores de San Bernardino. Según los documentos del juzgado, Apple ha declinado ayudar proporcionando ayuda técnica voluntaria al acceso del iPhone 5C de Syed Farook, que ha matado a 14 personas en una clínica de California el 2 de diciembre junto con su mujer Tashfeen Malik. Esta asistencia no incluiría eliminar la encriptación, pero sí que incluye ayudar a descubrir el código de la contraseña del iPhone. También incluye la asistencia a la hora de encontrar datos relevantes sobre con quiénes se estuvieron comunicando los atacantes, potencialmente a través de iMessage, y quién podría haberles ayudado a planear el tiroteo, según NBC News. El juez ha respondido con un documento de 40 páginas de la fiscalía de Los Ángeles en el que ordena a Apple que participe en la investigación.iPhonePantallaBloqueada

“El gobierno no ha sido capaz de completar la búsqueda porque no puede acceder al contenido encriptado del iPhone,” ha escrito. “Apple dispone de los medios técnicos exclusivos para ayudar al gobierno a completar su investigación, pero ha declinado ayudarlo voluntariamente.”

El juez ha considerado que Apple tenía que haber proporcionado ayuda técnica, lo cual incluye eliminar el límite del número de contraseñas con las que uno puede entrar en el iPhone y destruir la función de auto borrado del teléfono. La orden también dice que la compañía podría tener que fabricar software personalizado para lograr esto en caso de no disponer de la capacidad de poder hacer estas operaciones inmediatamente. Apple tiene cinco días para responder a la orden. La compañía todavía no ha hecho comentarios al respecto.

juez ordena a Apple hacer algo que, como yo entiendo, no puede tecnológicamente hacer.

No ha quedado claro si Apple podría ser capaz de llevar a cabo las exigencias del juez si tenemos en cuenta que la compañía ha dicho en el pasado que el 90 por ciento de los dispositivos que funcionan con iOS 8 o superior no pueden ser desbloqueados a la fuerza. La compañía dejó de guardar las claves de encriptado después de esta versión de su sistema operativo móvil, en septiembre de 2014. Incluso si Apple fuese capaz de eliminar el límite de contraseñas y la función de auto borrado, todavía haría falta para un software de desencriptación estándar más de 5 años para crackear el código de seis dígitos, según ha calculado el Washington Post. La única forma en la que el FBI podría hackear el código del iPhone de Farook, que funciona con iOS 9, es con un superordenador y la clave de hardware del iPhone. Pero Apple afirma que no tiene una copia de la clave.

A pesar de todo esto, la orden del juez debería añadir otra capa más al debate sobre el encriptado. El problema afecta a compañías tecnológicas como Apple, Google y Microsoft, que se enfrentan a las fuerzas de la ley y a su deseo de poder hackear y espiar los contenidos de los dispositivos móviles, evitando los medios de protección de la tecnología moderna. El director del FBI, James Comey, ha afirmado en el comité de inteligencia del Senado la semana pasada, que San Bernardino era un gran ejemplo de cómo la cooperación de las compañías tecnológicas podría ayudar a las investigaciones criminales si le dieran la información requerida a los gobiernos. Sin embargo, lo que quieren Comey y el FBI también puede afectar negativamente a las compañías tecnológicas estadounidenses ya que eso aumentaría la posibilidad de brechas de seguridad y la interferencia de organizaciones como la NSA en tratos de negocios internacionales.