Tras la retirada el año pasado del Samsung Galaxy Note 7, los fabricantes de hardware están haciendo todo lo posible por asegurarse de que sus smartphones sean tan seguros como puedan. LG se está tomando un tiempo extra en probar la seguridad de las baterías que irán en el LG G6 así como añadir hardware para ayudar a dispersar el calor. Se trata de un movimiento inteligente si los fabricantes están en duda acerca de la viabilidad de sus baterías. Después de todo, es poco probable que alguien quiera repetir el fiasco del Galaxy Note 7.
«Vamos a mejorar de manera significativa la seguridad y calidad de nuestros nuevos smartphones estrellas dado que más consumidores buscan smartphones seguros,» ha dicho Lee Seok-jong, del grupo de operaciones de comunicaciones móviles de LG Electronics.
Para hacer esto, LG está llevando a cabo intensas pruebas en sus baterías para asegurarse de que no explotarán o dañarán por accidente a alguien. Esto incluye exponer las baterías a un calor un 15 por ciento más alto de lo que señalan los estándares de Estados Unidos y Europa así como perforar y dejar caer las baterías desde alturas extremas.
El periódico Korean Herald recogió las declaraciones de un representativo de LG en las que decía que el LG G6 también contará con «tuberías de calor» de cobre que conducirán el calor fuera de la batería del teléfono. Una idea de cómo puede hacerse esto se ve en la imagen superior. Mientras que la adición de tuberías de calor de cobre en los smartphones no es nuevo (incluso el Galaxy Note 7 los tenía, y explotaba igual), sí que es algo nuevo para la línea de LG.
Por ahora, todo lo que sabemos sobre el G6 (aparte de la adición del sistema de tuberías de calor) es que probablemente tendrá una pantalla de proporción 18:9 QHD+ y que parecerá una mezcla entre el G5 y el LG V20. Con suerte sabremos más de LG en la MWC del mes que viene.
