El mercado de los Smartphones mueve muchísimo dinero, y como es lógico, esto causa mucha rivalidad entre las compañías. No es ningún secreto que la vieja rivalidad entre iPhone y Android se ha ido intensificando con los años, y que Apple decidió desinstalar las aplicaciones de Google en sus iPhone (YouTube y Google Maps, por ejemplo) perjudicando gravemente los beneficios de Google en los Smartphones de Apple. Actualmente, ambas compañías siguen manteniendo su competición, pero parece que han llegado a un pacto de no agresión en lo que se refiere al navegador de Apple, Safari.

El motor de búsqueda por defecto que ha utilizado siempre Safari es el de Google. Y puede que algunos os preguntéis cómo puede ser que Apple nunca haya buscado otra alternativa, como por ejemplo Bing (o en caso de no querer ayudar a Microsoft, DuckDuck Go). La respuesta se debe, por un lado, a que Google es a día de hoy el mejor motor de búsqueda del mundo, y Apple promete a sus usuarios la mejor experiencia de usuario, por lo que cambiar el motor de búsqueda a costa de sus usuarios sería deshonesto. Y por otro lado (y probablemente sea la razón más importante) Google le paga a Apple por el privilegio de seguir siendo el motor de búsqueda por defecto de Safari.

La transacción ha costado 3.000 millones de dólares

Debemos tener en cuenta que los anuncios del motor de búsqueda de Google siguen siendo la mayor fuente de beneficios de la compañía, por lo que no es extraño que prefieran pagar a Apple una cifra exorbitada de dinero para ser el motor de búsqueda principal de Safari, siempre y cuando les resulte rentable. Y desde luego la cifra es alta, ya que según el analista A.M. Sacconaghi Jr, este año Google ha pagado nada menos que 3.000 millones de dólares por los derechos de ser el motor de búsqueda por defecto de iOS.

Si tenemos en cuenta que en 2014 la cifra fue de 1.000 millones, Apple está sacando toda la ventaja que puede de este intercambio. Aunque Google ha triplicado sus beneficios desde entonces, por lo que esta situación beneficia a ambas compañías.