Como dicen, hay un momento para todo; y a veces podemos usar el teléfono o deberíamos no hacerlo. En la mayoría de los casos, utilizar un teléfono móvil en lugares religiosos porque es de mala educación y puede distraer a esas personas que sí han ido a rezar o a escuchar. Sin embargo, en Rusia parece que esto podría ser nada menos que causa para acabar en la cárcel. Un YouTuber del país, Ruslan Sokolovsky, se ha encontrado recientemente en un aprieto con la ley después de haber subido un video a YouTube donde jugaba a Pokémon Go mientras estaba en una iglesia.

Por lo visto, de acuerdo con la ley, esta acción sería ilegal. Cualquier persona a la que cojan utilizando el teléfono móvil en un lugar de culto se enfrenta a una multa de medio millón de rublos e incluso podría tener que hacer frente a tres años de cárcel, que es lo que ahora mismo quieren para Sokolovsky.

El veredicto se dará el 11 de mayo

De acuerdo con las palabras del joven, la razón de que decidiera grabarse jugando a Pokémon Go en una iglesia era una forma de protesta para hacer ver lo estúpida que podía ser la ley. Pero todo apunta a que la jugada le ha salido bastante más, pues se le ha acusado de incitar al odio religioso. El fiscal del caso quiere que Sokolovsky acabe en la cárcel. De acuerdo con las declaraciones de la agencia de noticias TASS, opinan que no hay motivo para que el acusado se libre de la ley y que pagar una multa no es suficiente.

Sokolovsky, por su parte, ha declarado que no se considera en absoluto un extremista; y acepta que aunque su acción pudo ser algo «idiota», no es un extremista y no quería incitar con su video jugando a Pokémon Go en la iglesia a ningún tipo de odio religioso. Se espera que el veredicto del caso llegue el próximo 11 de mayo.