Ya hace tiempo que Google manifestó su apoyo a la propuesta de la Comisión Federal de Telecomunicaciones de Estados Unidos con la cual sugerían abrir los descodificadores de la televisión por cable con el fin de que cualquier empresa pudiese aprovechar las transmisiones de televisión y poder así elaborar una nueva interfaz para ellos. Sin embargo, y pese a su apoyo, sí hay una cosa que preocupa a los de Google: las reglas de privacidad de los consumidores. Según el gigante de las redes, no es necesario imponer nuevas reglas de privacidad en los nuevos dispositivos y aplicaciones ya que la Ley de la Comisión Federal de Comercio y las leyes estatales de privacidad son de por sí muy estrechas, por lo que no hace falta crear más, y menos si lo van a hacer de forma específica para cada empresa que quiera hacer su propio decodificador.

Esto no implica que Google esté totalmente en contra de la protección de la privacidad de sus usuarios ni mucho menos. Lo que Google propone es compatible con lo que la propia Comisión sugiere: una extensión de las reglas que ya hay para los decodificadores actuales, de tal forma que sean aplicadas de igual manera en los nuevos. Para Google esas normas son más que suficientes, tanto en lo referente a la protección como en su aplicación.

Sin lugar a dudas, esto ha llevado a despertar una vez más las cuestiones sobre el compromiso de Google en lo referente a su compromiso con la privacidad. Al fin y al cabo, estamos hablando de una compañía que se embolsa enormes cantidades de dinero a través de anuncios que utilizan datos muy precisos de sus usuarios, basándose en qué le interesa y qué tipo de páginas visita continuamente, unos hábitos que podrían recoger más fácilmente a través de la televisión y sus preferencias a la hora de elegir un canal.

Google set top box

De hecho, ya algún que otro grupo de defensa de la privacidad que no anda muy contento con Google: “Es indignante que a medida que Google expande los datos que recoge para dirigir la publicidad, se oponga además a las garantías que propone la Comisión Federal de Telecomunicaciones gracias a normas más estrictas que podrían proteger la privacidad del consumidor”, expresaba Jeff Chester, director ejecutivo del Centro de Democracia Digital. En su comunicado, Chester sostiene que la postura de Google supondría una nueva forma para conseguir datos digitales de los usuarios con el fin de impulsar aún más su sistema de marketing.

Por su parte, la Comisión Federal no ha manifestado todavía cuáles serán las nuevas normas que quieren imponer en lo referente a este tema, si bien es verdad que quieren hacer un cambio pequeño aunque significativo. De hecho, su intención es dejar en manos de la Comisión Federal de Comercio sobre los diferentes modos de proceder cada vez que una empresa viole esos compromisos, algo con lo que la Comisión Federal de Comercio está de acuerdo.  A cambio, quiere que la CFT exija a cada compañía que declare sus compromisos de privacidad respecto a los consumidores.  De esta forma, será más fácil para la agencia establecer qué medidas tomar cada vez que se ignoren dichos compromisos.

Google

Teniendo en cuenta que la actitud de la propia Google es lo que está promoviendo que haya una relación más estrecha entre ambas comisiones, la de Telecomunicaciones y la de Comercio, es muy posible que esa propuesta para ampliar las normas sobre la privacidad de los usuarios sea estudiada concienzudamente y vea sus frutos muy pronto. Lo que está claro es que, salga lo que salga de ahí, Google no estará muy contenta.