Mientras Apple sigue batallando contra el Gobierno de Estados Unidos a raíz del tiroteo ocurrido en San Bernardino el pasado año, donde el Gobierno demandaba a la compañía estadounidense que facilitara el código de encriptación de uno de los terroristas, otras compañías de gran envergadura, tales como Facebook, Google y Snapchat, han decidido expandir el cifrado de datos de los usuarios en todos sus servicios. Vamos, que han querido darle con la mano bien abierta al gobierno estadounidense después de todo lo ocurrido con Apple y su caso contra el FBI. De hecho, y según The Guardian, mientras WhatsApp se prepara para lanzar un nuevo cifrado en sus llamadas de voz, junto con sus funciones de privacidad ya existentes, Google investiga sobre posibles usos adicionales para el cifrado de correos electrónicos más seguros.
Por otro lado, Facebook, sin duda el gigante de las redes sociales, también tiene entre manos un proyecto con el que pretende proteger mejor su servicio de Messenger, mientras que Snapchat, por su parte, está considerando hacer lo mismo con su sistema de mensajería.
Por su parte, se espera que Apple comparezca en la corte federal de California el 22 de marzo, con el fin de luchar contra la orden emitida por el FBI, tras acusar al Departamento de Justicia estadounidense de intentar manchar el nombre de la compañía con sus insustanciales y desesperadas acusaciones.
Todo esto viene tras la última demanda presentada en el Departamento de Justicia, en la que se exigía a la compañía que crease un software con el que pudiesen desbloquear el iPhone de uno de los atacantes en el tiroteo acontecido el año pasado. Desde el Departamento defendían que la postura de Apple de proteger la libertad y los derechos era corrosiva para las instituciones, además de demandar a la compañía de ayudar al Gobierno chino respecto a la seguridad de iPhone.
Los de Apple se han defendido ante todas estas acusaciones, diciendo en este caso que “El tono del escrito se leía como una acusación”. Bruce Sewell, consejero general de Apple y autor de esas palabras, añadía: “Todo el mundo debería tener mucho cuidado, puesto que al parecer estar en desacuerdo con el Departamento de Justicia equivale a que eres maligno y anti-americano, algo que está muy lejos de la verdad”.
Los fiscales del caso aclamaban que los propios datos de Apple mostraban que China les había demandado tener acceso a más de 4000 iPhones sólo en la primera mitad de 2015. Sin embargo, el propio Sewell defiende que esos nuevos datos se apoyan en una serie de informes que sugieren de forma errónea que Apple conspira con el gobierno chino con el fin de minar la confianza de los usuarios de iPhone.
La verdad es que ya no saben a qué más aferrarse. La disputa entre el gobierno estadounidense y Apple ha estado vigente desde diciembre, desde el lamentable atentado de San Bernardino, que si bien Apple defiende en que cree que las intenciones del FBI son buenas, no deja de sentir que dicha demanda vulnera los derechos de la compañía y sus usuarios. Claro que esa visión se tiñe bastante cuando el Departamento de Justicia los acusó en su presentación frente a la corte de que Apple había atacado la investigación del FBI diciendo que era de mala calidad y que ellos eran los “guardianes de la privacidad americana”. El Departamento de Justicia mantiene que la retórica de Apple no es sólo “falsa, sino también corrosiva de las mismas instituciones que están para salvaguardar las libertades y los derechos de los ciudadanos: las Cortes, la cuarta Enmienda, las venerables leyes y las ramas democráticamente elegidas del Gobierno”.
Ya el pasado febrero el FBI obtuvo una orden judicial con la que podía obligar a Apple a crear un nuevo software que permitiese al gobierno entrar en cualquier dispositivo fabricado por la compañía. Con esto, lo que pretendía el FBI era acceder a las funciones de auto-borrado de un teléfono, con el fin de recuperar los archivos eliminados que pudiesen ser fundamentales para cualquier investigación criminal. Ante esto, y como ya comentamos en otra noticia, Apple argumentaba que dicho software podría llevar a que no sólo el gobierno tuviese acceso a esa “puerta trasera”, sino también los hackers y otros criminales.
Lo que sin duda está claro es que seguiremos recibiendo noticias sobre este caso, que tanto está dando que hablar en todo el mundo.