Un caminante de Londres que confiaba únicamente en su teléfono móvil para guiarlo hasta una altura de 2000 pies en una cordillera ha tenido que ser rescatado después de que la batería de su teléfono se agotase. La policía y los rescatadores han criticado que el caminante, que tuvo que ser rescatado por vía aérea desde la montaña de Skye, ni siquiera supiera el nombre de esta. Este caminante londinense de 23 años llamó para pedir ayuda después de quedarse atrapado a más de 2000 metros de altura en una ladera de Bla Bheinn en Skye a las seis de la tarde del pasado domingo. Dijo a sus rescatadores que le gustaba el aspecto de la montaña en la cordillera Cuillin y que por eso decidió escalarla con ayuda de Google maps en su teléfono móvil, que más tarde vería agotada su batería. El líder del Equipo de Salvamento de la montaña de Skye, Gerry Ackroyd, logró determina en qué montaña se encontraba el hombre gracias a su descripción de ella.

Google Maps iOS

Este hombre no es el primero que sufre los estragos de una dependencia cada vez mayor en los dispositivos electrónicos. Hace años, un hombre murió cuando su vehículo cayó a un pantano mientras él seguía las instrucciones de su GPS, que indicaba un camino erróneo. Con un final menos definitivo, en 2013 supimos que una mujer belga apareció en Zagreb, Croacia, después de seguir ciegamente a su GPS mientras viajaba a Bruselas para recoger a un amigo en la estación del Norte. En lugar de 150 kilómetros, la mujer acabó recorriendo 1450 kilómetros a lo largo de dos días de viaje.

Aunque el GPS y Google Maps nos facilitan enormemente la vida, no debemos olvidar que somos responsables de nuestra propia seguridad y que antes de llevar a cabo una hazaña como la de escalar una montaña de 2000 pies, tenemos que estar seguros de lo que hacemos.