El director general de Netflix dice que el baneo a usuarios con VPN no ha tenido ningún efecto en su servicio ni en su número de suscriptores. Impedir que los usuarios puedan acceder a Netflix a través de redes privadas virtuales (VPNs) no ha dañado a la compañía de ninguna forma, ha dicho el director general de Netflix, Reed Hastings, en su última llamada de beneficios a los inversores. “Los usuarios de VPN son una minoría bastante pequeña, aunque bastante ruidosa también. Así que realmente no ha habido consecuencias para nosotros, como podéis ver en los resultados del primer cuarto de año en cuanto a beneficios,” ha dicho Hastings a sus inversores, resaltando el hecho de que Netflix ha visto una subida en el número de nuevos suscriptores, hasta alcanzar el récor de miembros de 6’74 millones de usuarios, superando el récord de 2015 de 5’59 millones de usuarios. Los VPNs son servicios que permiten a los usuarios de todo el mundo conectarse a una red privada virtual en internet. Son muy útiles para tener privacidad online, y ocultan la localización real del usuario. Sin embargo, se pueden utilizar también para saltarse la restricción regional de contenido de Netflix. Por ejemplo, se podía engañar a Netflix España para que pensase que estabas en Netflix Estados Unidos, y poder disfrutar del catálogo de ese país.
Los usuarios simplemente tienen que pagar su cuota de suscripción y (en el caso de no ser gratuito) la cuota del VPN para poder ver lo que ellos quieran, ya que por ejemplo en los Estados Unidos el catálogo de series y películas tiene mucho más contenido que las versiones de otros países. Tras las amenazas de banear estos servicios en 2015, en enero de este año Netflix anunció definitivamente que tomaría acciones para evitar que los usuarios utilizasen redes virtuales privadas (VPN) para esconder su posición geográfica y para que no sean capaces de acceder al contenido que no esté disponible en su región de origen, ya que Netflix ha pasado a estar disponible en 190 países.
“Algunos usuarios utilizan proxys para acceder a títulos que no están disponibles en su territorio. Para evitar esto, vamos a emplear las mismas medidas que otras firmas. Esta tecnología está en constante evolución y nosotros evolucionamos con ella,” Ha dicho David Fullagar, vicepresidente de arquitectura de envío de contenidos, en un post de su blog el 14 de enero. “Esto significa que durante las próximas semanas, aquellos que usen proxys y VPNs sólo serán capaces de acceder al servicio en el país en el que estén en esos momentos. Estamos seguros de este cambio no afectará a los usuarios que no usen proxys.”
Sin embargo, parece que aunque los usuarios estén molestos con la idea de no poder seguir accediendo a los servicios de Netflix en los Estados Unidos, siguen prefiriendo mantener su suscripción al servicio y hacer lo que puedan con el contenido disponible en sus propios países, lo que demuestra que las amenazas de los usuarios de boicotear el servicio y volver a la piratería online están teniendo un efecto muy pequeño por ahora.
